16 de junio de 2018

¿Opositar? ¡Vaya locura!

Esto mismo pensaba yo cada vez que alguno de mis amigos o compañeros me insinuaba opositar (en mi caso, para profe de Secundaria), y la verdad es que da miedo, es un compromiso, mucho trabajo y mucha fuerza de voluntad.

Solo hace unos meses que me metí en este gran lío que es opositar, pero ya os puedo contar muchas de las cosas que he descubierto.

Lo primero, que la gente está muy loca. Pero, como en todas partes, hay locuras buenas y locuras malas. Las buenas son esas personas que te ofrecen su ayuda sin pedir nada a cambio, ya sea con el material que ellos mismos han pagado o se han currado o aquellas personas que te ofrecen su hombro, sus oídos y sus brazos, para llorar, quejarte o darte un abrazo cuando lo necesitas.

En mi caso tengo la suerte de que esa persona me lleva ventaja en esto de las opos, así que me entiende mejor que nadie en el mundo. Así que, ¿porque no? Gracias María por escuchar mis audios de 20 minutos, por contestarme en un horario ininterrumpido desde las 6 de la mañana a las 12 de la noche.

Por otra parte está la gente loca en el sentido negativo; la salvaje competición, la secta de las academias (no digo que en todas las academias pase lo mismo, ojo, solo digo que ocurre), estas personas que venderían toda su sangre y morirían antes de compartir un tema contigo. Creo que cin esta explicación ya lo habéis entendido a la perfección, así que no insisto más en este tema.

Llegados a este punto he de decir que me he convertido en lo que Majo Guijosa llama una opositora autónoma, porque sí, porque quiero y porque puedo. Y también porque no tengo ganas, tiempo ni dinero para ir a una academia o a un preparador.

De hecho creo que no me estoy perdiendo gran cosa, la verdad. Aunque siendo sincera es cierto que a veces me gustaría tener una persona que respondiera mis dudas al instante, pero bueno, todo es tener paciencia y ser perseverante, hay muchas vías para conseguir respuestas.

Por suerte, a través de internet se puede encontrar mucho apoyo. Concretamente en Facebook podéis encontrar varias páginas de opositores e interinos donde podéis preguntar vuestras dudas.

El objetivo de esta entrada es sobre todo animaros, si tenéis la vocación de profesor, hacedlo, no pongáis excusas (yo soy la primera que lo hacía) por pereza o por incertidumbre, podéis hacerlo, solo tenéis que empeñaros mucho. Hay muchas personas que lo han conseguido antes, lo que debes preguntarte es ¿por qué no ibas a conseguirlo tú?

Siempre te va a parecer que ahora no es el momento, porque el momento perfecto no existe y nunca va a llegar, así que deja de esperarlo.

Yo os puedo decir que trabajo en jornada reducida (20 horas a la semana) y tengo un pequeño monstruito que no para ni dos segundos quieto, y aun así, me siento capaz, tenéis que valoraros a vosotros mismos. Efectivamente no es fácil, y siempre vais a ver a gente que se dedica únicamente a estudiar la oposición. Yo he conocido a gente que estuvo años preparando la oposición 12 horas diarias, y claro, te comparas y piensas, imposible.

No es imposible, exprimid el tiempo y la vida, no dejéis de vivir, pero intentadlo.


Ánimo a todos y todas. ¡Vamos a por ello!


PD: En el próximo post, para los que estéis más interesados he pensado escribir sobre el proceso que estoy siguiendo yo para conseguirlo, y espero que os sirva de ayuda, porque vamos a ser de los locos, pero de los locos buenos.